La CNDH inició una investigación con relación a la muerte de un normalista de Ayotzinapa el pasado 7 de marzo, en la cual está involucrada la Policía Estatal de Guerrero
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) informó que inició una queja de oficio por los hechos ocurridos el pasado 7 de marzo, en los que un estudiante de la Escuela Normal de Ayotzinapa perdió la vida y otro resultó herido mientras estaban en un retén de revisión de automóviles de la Policía Estatal, en la salida hacia el municipio de Tixtla, Guerrero.
En un comunicado, consideró que el caso es de “relevancia nacional” al tiempo de señalar que se mantendrá atenta de las investigaciones ministeriales con el propósito de “garantizar el pleno esclarecimiento de los hechos y el acceso a la justicia y la verdad de estos lamentables acontecimientos”.
Cabe mencionar que la madre de Yanqui Kothan Gómez Peralta, junto con el sacerdote Filiberto Velázquez, ofrecieron el sábado una rueda de prensa para dar a conocer que, según el dictamen pericial, el joven de 23 años murió de una bala en la cabeza, técnicamente por traumatismo craneoencefálico.
En un comunicado oficial, la CNDH expresó sus condolencias a los familiares de Yanqui Kothan Gómez Peralta y reiteró su compromiso de seguir de cerca las investigaciones ministeriales. Su objetivo es garantizar el pleno esclarecimiento de los hechos, así como el acceso a la justicia y a la verdad en torno a este trágico incidente.
Sin embargo, las versiones sobre lo ocurrido difieren entre las autoridades estatales y federales, y los compañeros de la víctima.
Mientras las autoridades señalan que el joven y sus compañeros no atendieron la señal de hacer alto en un filtro de revisión y se encontraban en una camioneta con reporte de robo, la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México (FECSM) responsabiliza a las autoridades estatales, incluida la gobernadora morenista Evelyn Salgado, de sembrar armas y fabricar delitos contra los estudiantes.
