Arturo Medina Padilla mencionó que entre las medidas de reparación está la develación de la placa y escultura del niño Ismael en dicho nosocomio, así como el pago de indemnización
El Estado mexicano ofreció una disculpa pública al reconocer su responsabilidad internacional por la violación a los derechos humanos de Ismael Mondragón Molina, quien el 15 de diciembre de 2004, y con tan sólo 1 año 11 meses, perdió la vida a causa de una mala práctica médica atribuida al personal del Hospital Infantil del Estado de Sonora.
A través de un comunicado, la Secretaría de Gobernación destacó que el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la dependencia, Arturo Medina Padilla, ofreció la disculpa a los padres del menor, Elizabeth Molina Hernández y Edgar Mondragón Bustamante, “por el daño irreparable que les fue causado”.
Y añadió: “El Estado no tuvo la capacidad para salvaguardar su derecho a la vida e integridad personal y hoy lo reconocemos con tristeza”. Mencionó que entre las medidas de reparación está la develación de la placa y escultura del niño Ismael en dicho nosocomio, así como el pago de indemnización.
El acto se enmarca en el reconocimiento de responsabilidad internacional por la violación a los derechos humanos de Ismael, un paso significativo para la familia que ha buscado justicia durante dos décadas. Medina Padilla subrayó que la falta de respuesta durante años fue atribuible al Estado, generando impunidad e indiferencia.
El subsecretario afirmó que las violaciones a los derechos humanos de Ismael generaron la responsabilidad internacional del Estado mexicano. Al dar cumplimiento al acuerdo de solución amistosa ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), reiteró el compromiso del Gobierno de México con el respeto y la garantía de los derechos humanos de todas las personas, especialmente de la niñez.
“Las niñas, los niños y adolescentes tienen derecho a disfrutar del más alto nivel posible de salud y de acceso a los servicios sanitarios”, enfatizó Medina Padilla, subrayando la obligación del Estado de proteger a esta población contra cualquier forma de violencia.
El subsecretario destacó que la disculpa pública no excluye la búsqueda de responsabilidades administrativas o penales y es un reconocimiento a los padres y la familia que han luchado incansablemente por justicia.
En un esfuerzo conjunto entre las partes involucradas, se implementaron medidas como atención médica, otorgamiento de becas, develación de una placa y escultura en el Hospital Infantil de Sonora en memoria de Ismael, indemnización y entrega de proyecto productivo a su familia, además de cursos en materia médica y derechos humanos para el personal del hospital.