Diez enfermedades son las que más aquejan a los hombres en la CDMX, principalmente porque no van al doctor. Arte, Andree Ávalos

Males de hombres

Especiales

Diabetes, infartos y cáncer son los padecimientos que más llevan a la tumba a este género, principalmente porque no van al doctor.

ARTE: ANDREE ÁVALOS

En la Ciudad de México, por cada hombre que solicita atención médica, acuden cinco mujeres a revisión. La poca prevención, el alto consumo de alcohol, tabaco y el sedentarismo provocan que a partir de los 40 años los problemas de salud se agudicen.

Datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi) indican que en la capital, la esperanza de vida es de casi 74 años para los hombres y de casi 79 para las mujeres, mientras que a nivel nacional es de 72 y 78, respectivamente.

De acuerdo con especialistas, la falta de prevención en la salud reduce la brecha en la esperanza de vida. Por ejemplo, en el caso de un infarto se pueden perder seis años, mientras que con la hipertensión y diabetes, el impacto es de 10 años.

El coordinador de Atención Domiciliaria de la Secretaría de Salud capitalina, Alberto Gallardo, explica que afecciones crónicas como diabetes, hipertensión, infartos y cáncer, así como hechos violentos y accidentes encabezan la lista de causas de muerte entre los hombres capitalinos.

“Los problemas inician desde la juventud cuando tienen alto consumo de alcohol y tabaco. Estos se agrupan con otros como los malos hábitos alimenticios, provocando que pasados los 40 años se desaten enfermedades y complicaciones que ponen en riesgo la vida de los hombres”, dice.

El top de la muerte

De acuerdo con el Inegi, de los 30 mil 596 hombres capitalinos que murieron en 2015, 6 mil 390 fallecieron por enfermedades del corazón. Al respecto, la Secretaría de Salud capitalina (Sedesa) indicó que por infartos al miocardio mueren 11 mil personas, entre hombres y mujeres, al año.

En la lista, le sigue de cerca la diabetes mellitus, que en la capital afecta a 4 millones de personas y que en 2015 cobró poco más de cinco mil vidas masculinas.

En tercer lugar aparecen los tumores malignos que ocasionaron la muerte de 3 mil 724 hombres capitalinos ese mismo año. De entre ellos, los más comunes son el cáncer de próstata, con 631 casos; así como de tráquea, bronquios y pulmón, con 324.

Completan la lista los padecimientos del hígado —como la cirrosis hepática—, los accidentes cerebrovasculares, la influenza y la neumonía, los accidentes —principalmente de tránsito—, las agresiones físicas, las enfermedades pulmonares obstructivas —como el EPOC—, y la insuficiencia renal, mismos que, en conjunto, cobraron la vida de 7 mil 896 hombres en 2015. Todos ellos se agudizan a partir de los 40 años de edad y se complican cuando se combinan con el alcoholismo, el tabaquismo y la obesidad.

Tampoco les gusta ir al doctor

Otro de los factores que incrementa la mortalidad en los hombres de la Ciudad de México es que pocas veces acuden a revisiones médicas para prevenir problemas de salud a futuro.

En la capital, el 85% de las consultas que se dan corresponde a mujeres y niños, mientras que sólo el 15% restante es solicitado por el género masculino.

A nivel federal, tanto la Secretaría de Salud como el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado nombraron a febrero como el Mes de la salud del hombre, después de que las estadísticas revelaron que la población masculina que atienden representa sólo el 33% de total de consultas.

Especialistas sostienen que la atención médica en hombres se dificulta porque los pacientes tienen miedo de tratarse, cuentan con poco tiempo para acudir al médico e, incluso, perpetúan el estereotipo de que los hombres no se enferman.

“A veces ponen como excusa que están trabajando, que están estudiando o no tienen tiempo. La verdad es que para hacerse un chequeo, el tiempo es lo que nos debe de sobrar. Hemos documentado también que el hombre pone excusas porque piensa que ir al médico es una cuestión de mujeres”, explica Alberto Gallardo, quien también es el responsable del control de enfermedades crónicas de la ciudad.

De acuerdo con él, en la mayoría de los casos los hombres piden atención médica cuando ya es demasiado tarde y se sienten débiles, cansados, tienen algún dolor agudo o se encuentran en una crisis de salud.

“Al menos en la ciudad, los hombres llegan con cinco años de atraso, en los que tuvieron el padecimiento, se automedicaron y ahora tienen alguna consecuencia que empeora su calidad de vida y les genera mayores costos económicos”, dice.

Acudir tarde al médico no sólo agrava la salud de los pacientes, sino que incrementa los costos en los sistemas de salud públicos. Un estudio del Instituto Mexicano de la Competitividad señala que las enfermedades, asociadas con un estilo de vida poco saludable, generan un gasto de 85 mil millones de pesos anuales a nivel nacional.

Por su parte, la Sedesa estima que un paciente que se trata en los servicios de salud de la ciudad por padecimientos como la diabetes —con tratamientos de hasta 20 años— implica un gasto superior a los dos millones de pesos por persona.

También calcula que la atención oportuna reduciría los costos al erario, además de que representa la posibilidad de curar o atenuar los efectos de un padecimiento.

En cifras:

  • 40 años es la edad en que se desarrollan más padecimientos mortales en hombres.
  • 15% es el pequeño porcentaje de citas médicas a las que acuden los hombres en la CDMX.
  • 85 mil millones de pesos anuales cuesta a nivel nacional tratar enfermedades crónicas.