Proteger el ambiente del axolote beneficia a 138 especies de vertebrados más, de acuerdo con la Dirección General de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre
Por Miriam Jiménez
En México se tiene registro de 17 especies de axolote, de las cuales 16 son endémicas del país, distribuidas en comunidades que tienen presencia en humedales, lagos o cuerpos de agua fría como la Laguna de Alchichica, en Puebla; Lago de Pátzcuaro, en Michoacán; Laguna de Zacapu, en Michoacán; Xochimilco, en la Ciudad de México; Lerma, en el Estado de México, entre otros.
De acuerdo con el director general de Zoológicos y Conservación de la Fauna Silvestre, doctor Fernando Gual Sill, en entrevista para +Chilango, “los axolotes son muy estudiados en otras partes del mundo por sus características físicas y regenerativas.
En el caso particular del axolote de Xochimilco, tiene la capacidad de regenerar sus tejidos, músculos, huesos, piel, tejido nervioso, pequeñas porciones de corazón y cerebro, y aunque también hay en otras partes del mundo, estos se encuentran en laboratorios porque son sujetos de estudio”.
Se tiene registro de que el axolote de Xochimilco (y otras cuatro especies), durante su ciclo de vida no llegan a la adultez, los investigadores llaman a estos ejemplares Peter Pan, porque conservan todas sus características de larva durante toda su vida, que es alrededor de 15 años, mientras que el resto se transforman en salamandras una vez que llegan a su etapa adulta.
Capacidades fisiológicas
Por sus cualidades únicas y diferentes al resto de los anfibios, también corren peligro. Los axolotes tienen un tipo de piel permeable que al estar en contacto con el agua o una reserva con alta humedad contaminada con alguna sustancia o agente infeccioso, puede afectar su organismo.
“Alrededor del mundo hay un hongo llamado Batrachochytrium que afecta a las poblaciones tanto que están tanto bajo el cuidado humano, como en vida silvestre. De hecho, se han extinguido ranas en algunas zonas del mundo por este tipo de agentes infecciosos. La pérdida y fragmentación del hábitat es otra razón por la que ha disminuido la población de anfibios”, señala el servidor público.
La presencia del axolote en el ecosistema,agrega, es de suma importancia debido a que es la base del alimento de otras especies, además de su capacidad para controlar plagas de mosquitos en los humedales.
También se le conoce como especie sombrilla, pues si se protege el ambiente del axolote se beneficia a 138 especies de vertebrados que conviven en el mismo hábitat, como garzas, reptiles, tortugas casquitos, serpientes y peces endémicos como charales y mexclapique.
Preservación
A partir del año 2000 se puso en marcha la Ley Federal de Vida Silvestre y seis años después, el Reglamento de la Ley General de Vida Silvestre, en los que se establecen las bases para el esquema de Unidades de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre (UMAS), con el objetivo de otorgar el permiso para la reproducción, tutela y venta legal de axolotes y otros anfibios. Siempre y cuando los criaderos estén registrados ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
De esta manera, algunos dueños de chinampas en Xochimilco han hecho criaderos de axolotes (bajo el esquema UMAS), en sus canales, con el objetivo de rehabilitar sus chinampas para el cultivo de hortalizas y vegetales.
Uno de los mayores beneficios de esta acción es mejorar la salud de la chinampa, que ya estaba en deterioro, gracias a la presencia de los axolotes. Otra acción a favor de la preservación de esta especie por parte de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México es la instauración de Anfibium, el Museo del Axolote y Centro de Conservación de Anfibios, ubicado en el Zoológico de Chapultepec.
Conservación de anfibios
“Queríamos tener un espacio dedicado a la conservación de anfibios y eso representa el Anfibium; en este espacio se conjuntan diferentes actividades en pro de la conservación de los anfibios, porque el objetivo primordial de los zoológicos y acuarios es la conservación de las especies, a través de diferentes herramientas, apoyamos la conservación dependiendo la especie”, afirma Gual Sill. En Anfibium se desarrollan actividades con el fin de crear un vínculo entre las personas visitantes y estas especies.
Desde su apertura, el museo ha recibido casi medio millón de visitantes de manera gratuita, en grupos de entre 25 y 30 personas, para que todas puedan disfrutar el espacio sin aglomeraciones pero sobre todo para que no generen ningún tipo de estrés en las especies que allí habitan.
Cabe resaltar que no se trata únicamente de un museo, también es un espacio de trabajo donde se realizan diagnósticos, pruebas y se desarrollan nuevas herramientas para el diagnóstico de enfermedades, de todos los animales que habitan en los tres zoológicos ubicados en la CDMX.
