Con el paso de los años, todo cambia, en pequeña o gran magnitud. La CDMX es una ciudad que día con día sufre transformaciones, algunas buenas y otras no tanto.
Te presentamos las huellas que el tiempo ha dejado en algunos edificios de la ciudad que en su momento fueron de utilidad para los chilangos. Otros que siguen adornando la Alameda Central, un lugar icónico de la ciudad, y un tren que desde los años 70 ha transportado personas, sueños y trabajo.
Baños Churubusco
En esta fotografía de los años 30 se aprecia el inmueble de los antiguos baños Churubusco, que además ofrecía alojamiento a los visitantes que acudían a estos rumbos de Coyoacán. Con el paso de los años, esta casona –una de las primeras de la colonia Country Club– tuvo diversos establecimientos comerciales, hasta su demolición.
Regalo Alemán
El Monumento a Beethoven se encuentra en la Alameda Central y fue un obsequio de la comunidad alemana residente en nuestro país. La escultura data de 1921 y fue realizada con motivo del centenario de la Novena Sinfonía del compositor, director y pianista alemán, Ludwig van Beethoven.
Inspiración Griega
En la Alameda Central se encuentra el Hemiciclo a Juárez, el cual honra la memoria del ex presidente Benito Juárez. Está construido de mármol de Carrara, con un estilo neoclásico e inspiración griega. En los años cuarenta, detrás de este semicirculo se encontraba una fuente que en la actualidad ya no existe.
Mujeres de Bronce
Los alrededores de la Fuente de las Danaides en la Alameda Central, en una imagen captada en los años treinta. En la escultura figuran dos mujeres vaciando sus cántaros en una pileta por lo que también es conocida como Las aguadoras. Existe otra réplica en la Hacienda de Chapingo.
Tren Suburbano
Un tren espera en los andenes de la estación de ferrocarriles en Buenavista, a finales de los años 70. De fondo sobresalen la Torre Insignia y el edificio Guadalupe Victoria, en Tlatelolco, y del lado derecho se encuentra la Central Termoeléctrica de Nonoalco. Hoy en día es la terminal del Tren Suburbano.
(Fotos: Colección Carlos Villasana/ MXM/ Lulú Urdapilleta)
