Andrés Manuel López Obrador declaró que el gobernador de Texas busca popularidad y candidatura republicana en Estados Unidos
El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que México, a través de la Secretaría de Relaciones Exteriores, impugnará la ley antiinmigrante que firmó el gobernador de Texas, Greg Abbott, que concede a la policía la facultad de detener y deportar sin el debido proceso a aquellas personas que hayan cruzado la frontera de manera irregular.
Desde Palacio Nacional, aseguró que el mandatario texano actúa de esta manera porque quiere ser candidato a vicepresidente del Partido Republicano y con estas medidas quiere ganar popularidad.
Greg Abbott firmó el lunes un paquete de tres leyes aprobadas en las sesiones especiales 3 y 4 de la Legislatura en respuesta a lo que considera una política de “fronteras abiertas” del presidente estadounidense Joe Biden. Entre ellas se incluye la SB4, la cual crea un delito penal por la entrada ilegal a Texas desde una nación extranjera; los reincidentes podrán alcanzar penas de hasta 20 años de prisión.
El Proyecto de Ley Senatorial 4 de la Sesión Especial #3, propuesto por los senadores Flores y Guillén, estableció una sentencia mínima obligatoria de diez años de prisión para el tráfico de personas y el tráfico continuo de personas.
En cuanto al Proyecto de Ley Senatorial 3 de la Sesión Especial #4, presentado por los senadores Huffman y Jetton, destinará 1.54 mil millones de dólares en ingresos generales a los Programas Fiduciarios de la Oficina del Gobernador. Este financiamiento se utilizará para operaciones de seguridad fronteriza, así como la construcción, operación y mantenimiento de la infraestructura de barrera fronteriza.
El tercer proyecto, el Proyecto de Ley Senatorial 4 de la Sesión Especial #4, propuesto por los senadores Perry y Spiller, establece un delito penal por la entrada ilegal al estado desde una nación extranjera.
La abogada Naimeh Salem ha instado a la comunidad a no sucumbir al estrés, ya que anticipa que estas medidas enfrentarán desafíos legales en los tribunales federales. En palabras de Salem, la inmigración es un tema exclusivo del gobierno federal, lo que podría poner en entredicho la validez de estas iniciativas estatales. A pesar de las aprobaciones locales, las medidas podrían encontrarse con obstáculos legales en Estados Unidos
