Fotografía Cortesía
En el marco del proyecto piloto “Diálogo de áreas metropolitanas sobre infraestructuras verdes: superando retos y potenciando beneficios”, las áreas metropolitanas de Barcelona (AMB), Valle de Aburrá (AMVA) y la Ciudad de México llevaron a cabo el tercer y último webinar titulado “Ciudades verdes y biodiversas como mecanismo de adaptación al cambio climático”. Durante dos días, se discutieron temas como la adaptación al cambio climático, la conservación de la biodiversidad y los desafíos del financiamiento en la infraestructura verde.
El webinar fue coordinado por la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, a través de la Coordinación de Estrategias para la Biodiversidad y la Dirección de Infraestructura Verde. Se enfocó en la importancia de los proyectos de infraestructura verde para acceder a fuentes de financiamiento y cómo estos proyectos requieren la integración de aspectos normativos, técnicos, económicos y sociales.
El proyecto piloto, financiado por la Asociación Mundial de las Grandes Metrópolis (Metrópolis), tiene como objetivo intercambiar experiencias entre las áreas metropolitanas para conservar la biodiversidad, mitigar y adaptarse al cambio climático mediante el incremento de la infraestructura verde y la protección de los ecosistemas naturales en entornos urbanos.
El proyecto se centra en tres temas principales: la conservación de áreas naturales protegidas en contextos urbanos, el mejoramiento de la conectividad ecológica y biodiversidad en sistemas urbanos a través de corredores biológicos desarrollados por la infraestructura verde, y la integración del enfoque de cambio climático en la planificación de la infraestructura verde y las estrategias de conservación.
Durante el webinar, se compartieron experiencias y proyectos, como el enfoque de Soluciones basadas en la Naturaleza, el programa de monitoreo de especies en la Ciudad de México y proyectos basados en ciencia ciudadana impulsados por Barcelona. Estos proyectos fomentan la participación ciudadana, generan conciencia ambiental y contribuyen al conocimiento y conservación de especies.
El proyecto piloto concluirá en septiembre de 2023 y proporcionará una caja de herramientas sobre infraestructura verde que recopilará las experiencias y soluciones implementadas por las áreas metropolitanas participantes, en beneficio del bienestar de las personas y la conservación del medio ambiente.
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