Cameruneses en el DF aplauden triunfo azteca

 

Ante una mañana calurosa y a la víspera del partido, el restaurante camerunés Lafricaine, en la Gustavo A. Madero se alistó para recibir a sus clientes frecuentes y algunos amigos connacionales.

Cerca de 30 chilangos y ocho africanos se dieron cita en este lugar.

Las cervezas y el alcohol no paraban de servirse, en tanto algunas familias completas, grupos de amigos o parejas seguían y se emocionaban cada que el balón estaba cerca de la portería.

Para este encuentro, los clientes mexicanos del Lafricaine fueron austeros, pues sólo tres personas se pusieron la verde; una chica sacó el sombrero con letras tricolor.

No así la competencia, quienes lucían uniformados con sus camisetas amarillas, y gustosos de que el árbitro haya eliminado dos jugadas con las que sacaría ventaja la selección azteca.

Apenas concluyó el primer tiempo, y Axel -uno de los meseros quien reside aquí desde hace un año- reconoció que los mexicanos traían buena ofensiva, así que esperaba hubiera un ganador y la justa no terminara en un empate.

La aficionada Karla Guerra se adelantó a asegurar el triunfo sobre la selección de sus amigos los camerunenses.

“Hoy venimos a apoyar a México, pero yo convivo con ellos desde hace muchos años, son personas muy, muy alegres, y eso es lo que me gusta, además de su comida, que aunque no tiene la mejor vista, es muy rica”, expresó Karla.

Definen marcador

Aunque varios dijeron llevar amistad con los anfitriones del Lafricaine, los chilangos no escatimaron en gritar, aplaudir, brincar de la silla y brindar ante el gol que marco “El Hermoso”, Oribe Peralta.

“¡México, México, México!” Fue la frase con la que festejaron el debut de los aztecas en el Mundial 2014, mientras los contrincantes con sonrisa socarrona contestaron que no se confiaran; sin embargo, desde entonces el juego quedó definido.

Una vez agotados los cuatro minutos extra, los cameruneses aceptaron con ánimo su derrota y se unieron a los aplausos de los chilangos, pero no faltó quien les grito: “¡No lloren!”.

Para Judith, una de las encargadas del Lafricaine, cualquier ganador es bueno, así que cambió su camiseta amarilla por la verde.

En tanto, Jackson dijo que de haber ganado su selección también habría extrañado ir a festejar a la estatua de la independencia, como lo hacen los mexicanos en el Ángel.

(DIANA BENITEZ/ MASPORMAS)