Chofer de la pipa que explotó aún debe dinero

La defensa de Carlos Chávez, chofer de la pipa que ocasionó la explosión en el Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa, presentó la garantía por un millón de pesos para enfrentar su proceso legal en libertad, pero todavía falta por pagar.

Esto se debe a que una empresa afianzadora le otorgó la garantía de pago al presunto responsable. Para obtener esta medida el imputado –a través de sus familiares– debió cubrir una cantidad por 120 mil pesos.

De esta forma, la afianzadora garantiza el pago al Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF) y aunque el detenido no haya cubierto el pago completo, éste deberá ser solventado posteriormente a la empresa, con bienes o efectivo.

Esto es completamente válido, ya que la jueza del caso Belem Bolaños, fijó el pago de la garantía económica en “cualquiera de las modalidades que establece el Código Nacional de Procedimientos Penales”.

De acuerdo con el artículo 173 de este código, la garantía económica puede cubrirse con las siguientes formas: depósito en efectivo, fianza de institución autorizada, hipoteca, prenda, fideicomiso y cualquiera que determine el juez.

El TSJDF informó que la garantía económica, fijada en un millón de pesos, servirá para el proceso de indemnización de las víctimas y familiares de la explosión en el hospital, además de que así se garantiza la estancia del imputado.

En la audiencia del pasado 6 de febrero, la jueza 32 del sistema penal acusatorio para delitos no graves vinculó a proceso a Carlos Chávez por los delitos de homicidio culposo (diversos III) y lesiones culposas (diversos V).

Además de la garantía económica Bolaños ordenó a la autoridad de supervisión de medidas cautelares del TSJDF que vigilara al imputado durante su estancia en el Hospital General de Balbuena, quien permanece en la cama 306 del nosocomio.