El balcón legislativo de la ALDF

Su carrera política no es extensa, pero este Licenciado en Comunicación fue subdirector del Instituto Mexicano de la Juventud, y ese es uno de los temas que más le preocupa en la Asamblea.

Como militante del PAN, fue director del Centro de Formación y Capacitación Política y secretario regional. Ahora espera ser recordado como alguien que trabajó, fue comprometido, honesto y resolvió cosas para la gente.

La lejanía de los capitalinos respecto del trabajo legislativo –según Anaya—parte de dos principios: “hay poca responsabilidad de los ciudadanos –me incluyo—en conocer quiénes son nuestros representantes y qué están obligados a hacer. Y también por parte de la Asamblea, de difundir la labor que hacemos en este recinto y el compromiso que debemos tener con los ciudadanos de nuestros distritos”.

¿Cómo justifica su sueldo?

“Todo va en cuestión de las responsabilidades, el trabajo y sobre todo, cómo es cada persona. Cada persona debe cumplir con su responsabilidad. Yo creo que si hacemos lo que tenemos que hacer, si cumplimos con nuestras funciones, pero sobre todo, resolverle problemas a la gente, puedes estar haciendo un buen trabajo, pero quien te evalúa es el ciudadano.

Tiene que ver con resultados, responsabilidad y honestidad. Hay un escepticismo grave en torno a lo que hacen los diputados”.

Lo mejor y lo peor de la ciudad…

“Es una ciudad con una diversidad impresionante, con muchas facilidades de acceso, de trasladarte, de conocer, de prepararte, de educarte… Es una ciudad enorme, muy rica culturalmente.

Pero también cuáles son los problemas que padecemos: cuando viajas en el metro, el tiempo, la insuficiencia de transporte, la contaminación y la inseguridad. Esta es una ciudad que en cuestión de seguridad necesita mucho trabajo, porque la padecemos todos”.

Museo favorito: Museo de la Tolerancia

Restaurante favorito: El Cardenal

Preguntas polémicas

Si su hija decidiera abortar, ¿la apoyaría?

No, pero creo yo que a los hijos se les debe de educar sexualmente desde niños.

Si tuviera un hijo homosexual que quisiera casarse, ¿lo apoyaría?

Definitivamente sí, porque a los hijos se les debe aceptar como son.

Si tuviera un familiar con una enfermedad terminal, ¿lo desconectaría?

No, definitivamente no. Yo creo en la vida.

Eduardo Santillán, obregonense de farándula

PRD

Distrito XVIII

Tres necesidades de su distrito: Movilidad, Adicciones, Seguridad

Hoy distanciado con el actual jefe delegacional de Álvaro Obregón, Leonel Luna, cuando ocupó ese cargo, Santillán se distinguió por el gusto que profesaba a diferentes personalidades de la farándula.

Es licenciado en Derecho por la UNAM, en donde da clases desde hace 13 años. Ha sido consejero nacional y estatal del PRD y jefe delegacional en Álvaro Obregón.

Sus temas prioritarios como diputado local –dice— son la defensa de la familia y la batalla en contra de las drogas, así como contribuir a que haya más rendición de cuentas en la ciudad de México y esta sea más segura. Quiere que la Legislatura sea recordada por haber contribuido a resolver los temas importantes de la ciudad. Pero cómo explica que su trabajo permanezca tan alejado del ciudadano:

“Los congresos locales es muy compleja su función porque se trata de órganos colegiados, porque a veces pareciera que solamente se puede medir por el número de leyes que se emiten y este es solamente uno de los aspectos.

El congreso o el órgano legislativo es un contrapeso muy importante, tiene una labor de fiscalización, una labor muy cercana de asesoría y sobre todo de que las opiniones, los intereses de la ciudadanía, puedan verse expresados en la Asamblea Legislativa. En mucho obedece a que necesitamos reforzar nuestra labor de comunicación con la ciudadanía”.

¿Cómo justifica su sueldo?

“Los sueldos de los funcionarios de la ciudad de México son de los salarios medios bajos del país. Mucho se ha avanzado para que haya gobiernos austeros y en este sentido, tiene que ver mucho con redoblar el trabajo de los diputados para que los sueldos estén plenamente justificados”.

Lo mejor y lo peor de vivir en la ciudad…

“Lo mejor es que los niveles de seguridad son adecuados. Existe inversión, se generan fuentes de empleo, hay espacios de convivencia, es una ciudad muy viva, muy importante.

Lo peor es que no tengamos derechos plenos, por lo que resulta fundamental la reforma política de la ciudad para que no seamos ciudadanos de segunda”

Restaurante favorito: Quesadillas del Desierto de los Leones.

Museo favorito: Franz Mayer / Castillo de Chapultepec

Espacio que rescataría de la ciudad: San Ángel

Preguntas polémicas

-Si tuviera un hijo homosexual que quisiera casarse, ¿lo apoyaría?

Me parece que es un tema de libertades, ni siquiera vale la pena el planteamiento de la pregunta.

-Si tuviera una hija que decidiera abortar, ¿la apoyaría?

La misma circunstancia. No es un tema de debate, sino de libertades.

-Si tuviera un familiar con una enfermedad terminal, ¿lo desconectaría?

No es debate. Creo que son temas absolutamente superados.

(KAREN ANDRADE y MARCELA NOCHEBUENA)