El “sucio” de sangre azul

Los 23 mil metros cuadrados que abarca el paradero de Taxqueña son una mezcla de basura, puestos ambulantes y microbuses en total desorden, algo común en la mayoría de los paraderos más importantes del DF.

 Ambos paraderos, norte y sur, se vuelven una epopeya para los usuarios antes de llegar al metro, ya que tienen que lidiar con camiones que no respetan el paso peatonal, condiciones insalubres en los alrededores y ambulantes que se ubican a pocos metros de los torniquetes de la entrada.

La autoridad en el sitio es nula, por lo que para la gente que usa Taxqueña como su ruta diaria no le queda mas que “aguantar vara”

(ALEJANDRO PÌÑA)