Fuertes Indicios, mayo 28

CUESTA ARRIBA.

Contamos con fuertes indicios de que la vida nocturna en la capital mexicana se ha deteriorado vertiginosamente.

Al asesinato del estadounidense Malcolm Shabazz en un bar de Garibaldi hay que sumarle las riñas en antros de la Zona Rosa y el funcionamiento irregular de no pocos establecimientos mercantiles.

Tan sólo en la delegación Cuauhtémoc, que encabeza Alejandro Fernández Ramírez, se han clausurado en siete meses unos 60 bares, restaurantes, centros nocturnos y negocios que operaban sin contar con las autorizaciones respectivas.

Ayer el Instituto de Verificación se vio obligado a reponer sellos de clausura en sitios como Janis, en Medellín 65, de la colonia Roma, y La Pulquería, en Jaime Torres Bodet y Eje 1 Norte, de la colonia Santa María La Ribera… y es que los propietarios intentaban burlar de nuevo a la autoridad.

Así las cosas, se ve muy complicado que surta efecto una campaña para atraer turistas de noche.

DE PISTOLAS.

Surgen fuertes indicios de que el 30% de los capitalinos conocemos a alguien que posee un arma de fuego.

Frente a esa realidad muy pronto el Programa de Desarme Voluntario del Gobierno de la Ciudad hará un nuevo recorrido por las 16 delegaciones políticas.

El Jefe de la Policía, Jesús Rodríguez Almeida, y la Directora de Igualdad y Diversidad de la Secretaría de Desarrollo Social, Adriana Contreras Vera, acudieron ayer a Milpa Alta para pedir a la población que por el bien de la comunidad intercambien pistolas por  equipo de computo, electrodomésticos o despensas.

Lo que ha ocurrido es que del 24 de diciembre a la fecha se han canjeado 3 mil 903 armas cortas, mil 259 largas, 356 granadas, 1 bomba, 1 cargador y 2 proyectiles, así como 44 mil 448 cartuchos. Pecho a tierra.

MAQUINA DESCARRILADA.

Hay fuertes indicios de que muy pronto una foxista estará reverdeciendo avenidas de la Delegación Miguel Hidalgo.

Se trata de Xóchitl Gálvez, ex titular de la Oficina de Representación para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de la Presidencia de la República, quien perdió una apuesta en la final del fútbol mexicano.

La ex funcionaria creyó que su querido Cruz Azul rompería el maleficio y levantaría la copa de balompié nacional  lo que evidentemente no ocurrió.

Así que Gálvez Ruiz ya deberá estar buscando los árboles para plantar en Parque Vía o algún otro camellón… como se comprometió si la máquina perdía frente a las Aguilas del América.

Ojalá no se le ocurra sembrar eucaliptos rompe banquetas. Los vecinos tienen serios problemas con esa especie.