Los autos no serán prioridad en el Centro Histórico

El modelo mixto de la calle 16 de septiembre, que será peatonal en un 60 por ciento, podría replicarse en otras calles del centro como Corregidora, Argentina, Héroes del 47 y Moneda, aunque esta última podría parecerse más a Madero.

Este traerá mayores beneficios que el de Madero, pues el auto entrará a la vialidad “como invitado”, pero la prioridad será peatonal, detalló el titular de la Autoridad del Espacio Público, Eduardo Aguilar, al realizar un recorrido por la primera etapa de la obra, del Eje Central a Bolívar, con los diputados locales Carlos Hernández Mirón y Roberto Candia.

En 16 de septiembre, las aceras que se están ampliando medirán 4.20 metros de cada lado y la decisión de volverla en mayor medida peatonal se tomó partiendo de la afluencia en hora pico, es decir, un sábado por la tarde en la vialidad se podían encontrar 4 mil 500 peatones por hora, en comparación con 300 a 500 automóviles.

Además de los espacios peatonales, el proyecto –que implica un gasto de 40 millones— incluye 77 luminarias y 40 encinos a lo largo del corredor semipeatonal.

Durante la obra, especificó Aguilar, se evitarán los cierres de calle, que en los últimos días solo se han hecho para recoger material y escombros, pero en comunicación con los vecinos. La idea es que la totalidad de la calle, que se modificará en tres etapas –la siguiente de Bolívar a Isabel la Católica y la última a 5 de mayo—, termine en diciembre y en enero solo se añadan algunos elementos del mobiliario.

“El tema de lo que llamamos calle compartida es hablar del mismo nivel, pero limitando los accesos a vehículos solo a destinos particulares como son estacionamientos y algunos lobbys o zonas necesarias, sin que el flujo sea continuo, porque la continuidad en base a estudios de aforos, sucede que muchos vehículos lo utilizan como calle de paso y no de destino”, explicó Aguilar.

El diseño mixto busca revertir esa vocación a que 16 de septiembre sea una calle de destino con prioridad peatonal, sin sacrificar al automóvil, con mantenimiento y seguridad. Según el titular de la AEP, aunque en su operación convencional sea solo para destinos particulares, en caso de alguna contingencia o necesidad, se abriría toda la calle para operar en cualquiera de los dos sentidos.

Las bicicletas también podrán circular sobre la vialidad, aunque se implementarán campañas para que los automovilistas las respeten, y estas a su vez a los peatones. También se gestionarán estacionamientos generales y no solo estaciones Ecobici.

“Estos proyectos urbanos son también detonadores económicos, tenemos el caso de Madero, que además del beneficio social, ha traído un beneficio económico e incrementa la plusvalía. Hicimos un estudio del valor de la tierra previo y haremos uno posterior para entregárselos y poder cuantificar cuál fue el beneficio en la plusvalía de la zona”, indicó y comentó que en Madero ha sido de hasta el 200 por ciento.

(Marcela Nochebuena)