Matrimonios gays, sin seguro social

Sólo 30 matrimonios gays en todo el país tienen hoy acceso a la salud como beneficiarios de su pareja.

Más de 2 mil 500 parejas del mismo sexo han contraído matrimonio en el Distrito Federal; el número de estas que han podido compartir la seguridad social representa apenas el 1.2 por ciento.

Esto se debe a que a pesar de que las leyes del Instituto Mexicano del Seguro Social y del ISSSTE sólo utilizan la palabra cónyuge –que en el DF ya implica ambos sexos— se han hecho interpretaciones restrictivas, con lo que no se respeta el Código Civil capitalino y el respaldo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación dio a los matrimonios gay.

“Se están haciendo interpretaciones restrictivas. Es una cuestión de interpretación amplia de los artículos, porque en todo el cuerpo está prevista la palabra cónyuge”, criticó la diputada perredista Ernestina Godoy.

A pesar de que no existe un impedimento legal para el acceso a la salud de estas parejas, hasta ahora la única manera de hacerlo ha sido el amparo, que ha funcionado en un porcentaje muy bajo.

Por ello, la Comisión de Salud en la Asamblea Legislativa generará un exhorto al Congreso de la Unión para garantizar en las leyes del IMSS y el ISSSTE el acceso a la salud de las parejas del mismo sexo.

Además, se planteará una iniciativa para crear un Protocolo de Salud Integral para los hombres y mujeres transexuales desde la infancia, informó el diputado petista Rodolfo Ondarza, presidente de la Comisión.

Godoy explicó que con la reforma al artículo 146 del Código Civil del DF, la palabra cónyuge aplica para hombre o mujer y como los estados son quienes definen sus códigos de esta materia, la seguridad social tendría que ser respetada por instancias jurisdiccionales.

Jaime López Vela, presidente de la asociación Agenda LGBT, apuntó que crear un protocolo de salud para esta población en el distrito federal les permitiría una atención integral desde niños, para que puedan tener acceso a los procesos terapéuticos.

Destacó que el poder judicial ha sido un aliado para lograr el acceso a la salud, aunque no se ha logrado generar jurisprudencia debido al reducido número de amparos, que no sólo han tramitado capitalinos, sino parejas de Colima, Yucatán, Jalisco y Tabasco.

La falta de estos cambios en los marcos jurídicos, señaló, no ha permitido avanzar en igualar para homosexuales los derechos que los heterosexuales adquieren con el matrimonio.

(Marcela Nochebuena)