Toma de Rectoría: nueve días y nada

Bajo el resguardo de 650 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSPDF), se cumplió el noveno día consecutivo de la toma de Rectoría de la UNAM por parte de encapuchados.

El dispositivo de seguridad se implementó bajo dos objetivos: resguardar a los aficionados del club de fútbol y vigilar posibles enfrentamientos entre los manifestantes y seguidores.

La tensión crece

La tarde del pasado sábado, un estudiante de la Facultad de Derecho burló las barricadas puestas por los encapuchados en la entrada principal de Rectoría. La respuesta de los supuestos estudiantes del CCH Naucalpan fue rodear al joven y golpearlo.

Lo acusaron de “porro” enviado por el rector de la UNAM, José Narro, para provocar incertidumbre en el contingente.

En tanto, ayer no se registró altercado alguno y las instalaciones, consideradas Patrimonio de la Humanidad desde 2007, se mantuvieron cerradas.

Los encapuchados, que dicen ser estudiantes del CCH Naucalpan, han escenificado un par de roces con medios de comunicación y con estudiantes de la UNAM.

La Línea de tiempo de la Toma de Rectoría 

Van nueve días de toma y contando…

-El viernes 19 de abril un grupo de 15 encapuchados irrumpió en la Torre de Rectoría para bloquear el acceso, rompieron vidrios y pintaron mensajes de protesta contra el rector de la UNAM.

-El lunes 22 de abril José Narro Robles, rector de la UNAM, aseguró que no cederá ante la presión de “unos cuantos” y exigió la pronta liberación de las instalaciones.

-El martes 23 de abril, la PGR recibió de manera formal la denuncia del rector universitario, mientras que el comisionado de Seguridad nacional, Manuel Mondragón, aseguró que espera la orden para enviar a la Policía Federal y recuperar el inmueble.

-El miércoles 24 de abril, se suscitó el primer foco de tensión cuando cinco encapuchados agredieron a miembros de la prensa.

-El sábado 27 de abril, un estudiante de la Facultad de Derecho burló las barricadas de los manifestantes y fue golpeado, este fue el segundo acto de tensión en la Torre de Rectoría.

(DAVID RODRÍGUEZ)