El reto de construir heroínas

Mientras va manejando Juana Inés Dehesa revela que nunca podría ser guionista porque le encanta usar 18 palabras para ejemplificar algo que se puede hacer con una.

Es la hija de Germán Dehesa, aunque eso es punto y aparte, porque ella ha hecho una carrera literaria por sí misma. Su libro Treintona, Soltera y Fantástica tuvo tanto éxito que evolucionó en el guión de Buscando a Inés, película que dirige Salvador Cartas y protagoniza Bárbara Mori.

“¿Bárbara? Me gusta la vibra que tiene, no podría citar su filmografía pero me parece muy bien. Además todos mis amigos quieren ser extras en la filmación pues dicen que es ‘la más guapa del mundo’”.

La obra cuenta la vida de una treintona presionada por su familia y la sociedad a cumplir con los roles establecidos para una mujer de esa edad: casarse y tener hijos. Hace unos días comenzó el rodaje de la cinta en Guadalajara.

Juana Inés opina poco sobre el proyecto de cine, no le ha caído el veinte de que su historia llegue a la pantalla grande. “Mis amigos me preguntaban ‘pero ¿por qué no estás emocionada?’ y yo decía ‘no me la creo’, porque veo el periódico y a Bárbara Mori haciendo declaraciones, y digo no sé de que hablan y de qué libro están hablando… Digo ‘un día me voy a sentar en un cine y ¿va a ser de mi libro?, hay una parte de mí muy incrédula y fascinada por el fenómeno” en el que también actúan Andrés Almeida y Jordi Mollá.

Solía creer que estas situaciones sólo le ocurrían a escritores como Gabriel García Márquez, “aunque no me estoy comparando con él”, aclara. Pero, en el fondo, está consciente de que le sucede a varios novelistas, y ella es eso. Tampoco es de las que se mete a modificar el guión. “No es un lenguaje que yo conozca, ademas no quiero ser ese escritor que dice ‘¡están traicionando mi obra!’; no, yo ya lo eché al mundo y hagan lo que quieran”.

Lo de ella es la escritura, y su meta es la construcción de heroínas. Su nueva obra se llama Socorro, pero me dicen Coco y lo presentará el sábado 17 de octubre en la FIL Monterrey. “Es un poco como la novela que emana de las Treintonas[…], es una mujer en Querétaro de veintitantos años que se encuentra en la disyuntiva de me caso con el novio de toda la vida, con el que todo el mundo espera que me case, o tomo otro camino y a ver cómo me va; está contada desde la protagonista”. Justo eso es lo que le hace falta a la literatura y al cine mexicano: mujeres protagonistas alejadas de los estereotipos, opina Juana Inés.

“El cine se ha dedicado a estas historias sórdidas, terribles, y de retratar lo que sucede en un sitio específico, pero se nos han olvidado las historias más leves. La comedia es un género que todavía nos cuesta. Nos falta explorar otras fórmulas; la novela de la vida cotidiana se menosprecia y, sin embargo, hay todo un arte en construir una buena novela, una historia en la que puedas habitar un ratito”.

Cree firmemente que las comedias románticas no tienen por qué ser frívolas, y lamenta que sólo películas como Heli o El Infierno tengan carga emocional. “Esas son historias que te dejan hecho un trapo, las que yo propongo son para pasar un buen rato y llevarte algo”.