Memorias de celuloide: el cine viaja en Metro

¿Alguna vez has visto un póster oficial del estreno en México de la película La cabalgata, dirigida por Charles Chaplin en 1938? ¿Y qué tal uno que anuncia a El Gordo y El Flaco como: “Los mejores cómicos que han existido en todos los tiempos, que te harán desternillarte de risa”?

Son dos de las joyas reunidas en la exposición Memoria en Celuloide, una colección de más de 100 objetos (fotografías, boletos, programas de mano, carteles, cámaras, proyectores, moviolas, reseñas, fotografías) que le permitieron a nuestros padres y abuelos disfrutar la magia del cine. La muestra lleva varios meses rolando por la ciudad, pero ahora puedes verla en el Metro.

En el famoso Túnel de la Ciencia (que por muchos años fue el transbordo más largo del Metro), podrás ver cómo se promovían las películas mexicanas de los años 70: por ejemplo, Los amantes fríos (protagonizada por Ignacio López Tarso en 1978), cuyo eslogan era: “Dormir con la comadre no es tan fácil, cuando al lado de la cama está el cadáver del compadre”.

Otra maravilla de esta exhibición son las fotografías de los viejos y ya extintos cines defeños: el Centenario, el Orfeón, el Popotla o Cinelandia; además de los viejos proyectores de carrete que hacían ruido durante toda la función y le ganaban sonoras rechiflas al cácaro cuando llegaban a fallar.

La idea es hacer un recorrido por la historia de la producción y exhibición del cine mexicano. De allí viene el nombre de esta exposición: ese material plástico conocido como celuloide, que absorbe la luz y capta las imágenes provenientes de la cámara… y muchos sueños.

Sólo pagaras cinco pesos y, cuando termines de recorrer la muestra, podrás trasladarte en Metro a cualquier lado. Mejor que eso, ni en las películas.

Memoria en celuloide
Paseo de la Ciencia. Transbordo del Metro La Raza, Líneas 3 y 5.

Lun-vie, 5-24 horas. Sab, 6-24 horas. Domingos y días festivos, 7-24 horas. $5.

(Aretha Romero)