Ocho cosas de las que estamos hartos

Luis Gerardo Méndez. Es muy simpático, está guapo y actúa bien. ¿Pero tan pobre es nuestro star system como para que todos los comerciales los tenga que protagonizar él? ¡Hay que variarle!

Keep Calm. Este cartel británico de la Segunda Guerra Mundial se empezó a viralizar en internet en 2009, pero este año alcanzó niveles insoportables. Keep calm… y olvídemonos de este meme.

 Textos azotados sobre las selfis. Amamos las selfis, todos nos las tomamos. Por eso nos caen gordísimos los “sesudos” ensayos y artículos sobre “la selfi como muestra de la degradación de la humanidad”.

Lugares con cabezas de animal de muerto como decoración. Llevamos años pensándolo y prediciendo que ya se van a acabar, pero nomás no. En 2015, por favor, ¿podrían encontrar algo más original?

Cualquiercosería. “AHAHAHAHA K CHISTOSO”… dijo nadie después de 2010. Cualquier negocio con la fórmula “artículo determinado + producto + ería” (“la productería”) es chafísima.

Pugs. Amamos a los pugs y a todos los animalitos de la creación (excepto, quizá, a las chinches). Pero también hay otros perros… ¿han pensando en razas callejeras, no de criadero, que realmente necesitan un hogar?

Memes con faltas de ortografía. Esto no es novedad, ni creemos realmente que se vayan a acabar, pero qué vergüenza querer hacerse el chistoso cuando, por ejemplo, no sabes la diferencia entre “hay” y “ay”.

Hamburguesas chafas. Los dos últimos años, las hamburguesas fueron el platillo de moda en el DF. Por eso, cada media hora abre una nueva hamburguesería oportunista; y cada una es peor que la anterior. Basta.