Foto: Diana Féito

Bacon Bar CDMX: el paraíso del tocino en la capital

Comida

Imagina lo siguiente: queso gouda, mermelada de tocino, crema de cacahuate y 180 gramos de carne de res cubiertos por dos bollos de pan artesanal. Acabas de descubrir la Bacon Jam Burger, hamburguesa que conquistó el corazón de los asistentes de Comilona en 2016. Dos años después, Jorge Cota, mejor conocido como Bacon Boss, apostó por abrir Bacon Bar CDMX (Campeche 367, col. Condesa) dentro del corredor gastronómico Comunal, lugar donde todo el menú ¡tiene tocino!

Y como lo mejor de la vida es grat… digo, tiene tocino, nos lanzamos a conocer este pequeño lugar de felicidad. La carta es corta, pero muy bien pensada. Todas las recetas fueron creadas por Jorge, quien se inspiró en el canal de You Tube Epic Meal Time —hasta tiene barba, como el protagonista—.

Impulsado por sus amigos, Jorge dejó de ser un nómada del tocino para instalar su barra en la Condesa. Sitio donde encuentras un trío de hamburguesas: la Bacon Jam que describimos al inicio; la Chili B, que lleva una buena porción de frijoles y carne, y la Bacon Boss Burger, con queso cheddar, tocino y salsa honey sriracha. No puedes perderte esta última, pues la salsa que lleva ha sido perfeccionada desde hace cuatro años.

Si te gusta el mac n cheese, aquí preparan uno con crema de queso con cerveza porter y bits de tocino —que seguro te encantará—. Lo que nos lleva a hablar de sus chelas: uno de los socios del bar es maestro cervecero, así que también hacen sus propias cheves. Tienen IPA, blonde ale y la que amamos nada más por el nombre: ¡la Porkter! #aplausos. Por cierto, solo son de barril, así que no podrás probarlas en otro lado.

Y como dirían los gringos: last but not least, hablemos de los postres. Manejan un cuarteto, pero como Los Beatles, siempre hay un favorito —no le digan a John—. La obra maestra es The Great Golden Bread, que a continuación describiremos para tu deleite: pan francés empanizado con cereal Fruity Pebbels, Nutella, plátano, tiras de tocino y muuucho maple. Y sí, sabe tan obsceno como suena.

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