“La oscura operadora de Bejarano”

Es la consentida del profesor René Bejarano. Famosa por ser su personera y pedir y cobrar favores a su nombre. Ariadna Montiel, diputada del PRD en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, se encarga de la operación política y el manejo de los dineros y alianzas del “señor de las ligas” en el DF.

 De Montiel se puede decir mucho, desde que fue una de las cabezas del Consejo General de Huelga en la UNAM, en 1999 -donde compartía el liderazgo con personajes tan impresentables como Alejandro Echevarría, “El Mosh”-, o sobre su manera prepotente y déspota de manejarse con subalternos, asesores y personal a su cargo. Incluso grita a sus compañeros diputados –integrantes de la misma corriente que ella, Izquierda Democrática Nacional-, cuando la contradicen. Es tal su control, que los diputados que le son leales, con una simple mirada, se cuadran.

Siempre bajo el cobijo de Bejarano, fue él quien le pidió –sin que ella lo lograra- que disputara el liderazgo de la bancada perredista en la ALDF al hoy coordinador Manuel Granados. Obediente y disciplinada, como la califican sus propios compañeros de tribu, Montiel no sólo ha construido un frente opositor –cada vez más raquítico- al jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera desde la legislatura local, sino que es la responsable de operar el trabajo sucio a favor de aquellos grupos que buscan hacerle ruido al gobierno capitalino.

Es sabido que René Bejarano está que trina contra Mancera, y no ha escatimado en los intentos de golpear la imagen del jefe de gobierno. “El señor de las ligas” asegura que tenía un pacto con el gobernante capitalino, y no se cumplió. En corto, lo llama traidor. La realidad es que a Bejarano le duele haber sido marginado. Mancera, primero, le ganó la coordinación del PRD en la ALDF. El profesor buscó por todos los medios imponer a su incondicional Ariadna Montiel, pero a final de cuentas fue el jefe de gobierno quien salió victorioso, pues logró colocar en la posición Granados, su ex coordinador de asesores en la Procuraduría capitalina. También enojó a Bejarano que sus cercanos fueran relegados del gabinete capitalino, y dolió más perder la presidencia del PRD DF.

Enfrentado con el jefe de gobierno, Bejarano ha perdido posiciones clave y su tribu se ha visto disminuida. Por eso instruyó a Montiel a ser la opositora más férrea de Mancera. Por la vía institucional, sí, pero también desde la calle. Por eso ha sido ella quien ha operado buena parte del apoyo logístico y de víveres, para mantener el plantón que desde hace más de un mes mantiene la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que ha generado dolores de cabeza a los capitalinos y que ha buscado enrarecer el ambiente al gobierno de la Ciudad.

Montiel juega sucio. Lo hace desde su amplia casa en la colonia Del Valle, que supera con creces los 6 millones de pesos, aún cuando sus ingresos no alcanzarían para comprar semejante propiedad.

Pero lo anterior sería mera anécdota, así como su nula presencia en su módulo de Atención Ciudadana –que pagamos todos-, o su negativa a informar cuánto y qué personal tiene a su cargo (negada a rendir cuentas y transparentar lo que hace, tampoco ha querido abrir una cuenta en Twitter “para no exponerme”, ha dicho a sus cercanos). También sería un asunto a olvidar su intención de convertirse en jefa delegacional en Coyoacán –y no en balde, ser una de las orquestadoras del “fuego amigo” contra el actual delegado, Mauricio Toledo- a partir de 2015.

Lo que no es un hecho a obviar es que, sobre la operadora de Bejarano, pesan sendas acusaciones por desvío de recursos y enriquecimiento ilícito, de los cuales Montiel sería responsable cuando ocupó la dirección de la red de transporte RTP, durante el gobierno de Marcelo Ebrard. Y no se trata de señalamientos al aire. En la Procuraduría capitalina se encuentra la Averiguación Previa FSP/ B/1345/09-06, en la Fiscalía para Servidores Públicos, por un supuesto desvío millonario.

Así que en lugar de hacerla de representante, personera y hasta cobradora de favores de René Bejarano, Ariadna Montiel deberá aclarar su oscuro paso por la administración capitalina. En vez de estar en la grilla y apoyando y operando a favor de la CNTE en la Ciudad, bien haría la operadora del “señor de las ligas”, en comenzar por explicar el destino de recursos públicos que tuvo a su cargo. Digo, si no es mucha molestia.

(MANUEL LÓPEZ SAN MARTÍN)