Dan clases de civismo a capitalinos

Las clases de civismo no regresarán a las aulas de los niños de primaria a menos de que la Secretaría de Educación Pública (SEP) instrumente dicha adecuación, pero aún hay esperanza para fomentar este conocimiento entre la sociedad.

Ésta es la tarea que pretende lograr el “Foro Función Pública y Cultura Ciudadana, por una Ciudad más Amable”, que tiene lugar en el Antigua Escuela de Jurisprudencia y que reunirá a varios expertos hasta el próximo 30 de octubre.

Durante la inauguración, el titular de la Consejería Jurídica y de Servicios Legales, José Ramón Amieva, destacó la importancia de este evento, pues les permitirá crear nuevas políticas para fomentar un mejor ambiente entre los ciudadanos.

APP CÍVICA

En entrevista, Amieva adelantó que la dependencia a su cargo trabaja en la creación de una aplicación para teléfonos inteligentes que ayudará a los ciudadanos a realizar denuncias por diversas faltas cívicas.

Aunque ésta ya se encuentra prácticamente terminada, todavía falta que el programa se adapte a los sistemas operativos más utilizados en los celulares de los capitalinos, por lo que se espera que esté lista antes de finalizar el año.

El consejero jurídico indicó que tienen registradas 67 conductas cívicas que se trasgreden de forma frecuente en la ciudad, pero solamente se denuncian y sancionan cinco de ellas de forma frecuente.

De acuerdo con los datos recopilados por la dependencia, las faltas cívicas más comunes en la Ciudad de México son riñas, ocupar de manera irregular la vía pública, ingerir bebidas alcohólicas en la calle y conducir alcoholizado.

SUPER CÍVICO STAR

Una de las personalidades más aclamadas durante el primer día del foro fue Arturo Hernández, quien saltó a la fama gracias a Internet tras subir una serie de videos donde exige a los ciudadanos que respeten los derechos de terceros.

El “Comandante Hernández” de los Súper Cívicos exhortó a las autoridades capitalinas a que desarrollen más sistemas compatibles con los teléfonos celulares para que toda persona pueda convertirse en vigilante de la capital.

(IGNACIO GÓMEZ)