Heroína por instinto: la policía que rescató a bebé en el Metro

Ser policía le ha causado a Isabel Segovia tristezas y alegrías de la misma intensidad: le costó su matrimonio, pero también le permitió salvar la vida de un bebé.

Aunque tiene los párpados pintados de rosa y las pestañas largas y negras, no logra suavizar su mirada. Isabel aprieta firmemente la mano cuando saluda y se para derecha.

Sin embargo, sólo basta preguntarle por sus hijos para sacarle una sonrisa.

Tiene 39 años y ya es madre de cuatro hijos y abuela de cuatro niños; por eso, cuando vio a la recién nacida en el baño de la estación de Metro Constitución de 1917, su instinto, como ella misma lo llama, la obligó a salvarle la vida.

El domingo pasado, a las 10 de la mañana, la oficial estaba en los andenes junto con su compañero Ulises Gómez cuando recibieron una llamada de su jefe de turno, el sargento primero Víctor Acuña, avisando que la señora de limpieza había encontrado un feto en uno de los escusados del baño de mujeres de la estación Constitución de 1917.

Isabel Segovia ha sido policía durante 10 años y, dice, pocas cosas la asustan. Cuenta que una vez detuvo a un hombre a punto de violar a una niña de 15 años en el Metro Pantitlán. En esa ocasión, su mayor recompensa fue ver la cara de los padres cuando su hija estuvo a salvo.

Este domingo, luego del aviso, ella y su compañero llegaron al baño preparados para ver el feto, pero al abrir la puerta del tercer retrete escuchó el llanto de un bebé.

El protocolo de seguridad dicta que la obligación de los policías es llamar al Ministerio Público para iniciar una investigación, sin embargo, dice Isabel, por instinto maternal decidió, sin pensarlo dos veces, colocarse los guantes que guarda en el chaleco y cargar al bebé, que resultó ser una niña.

Recordó lo que aprendió en los cuatro semestres que estudió de enfermería y le amarró el cordón umbilical en el área de lavabos. Después le limpió la sangre y los fluidos que tenía en la nariz y en la boca.

“Le di masajes en su pechito y lo estuve sobando para que sintiera calor, los pequeños recién nacidos siempre necesitan calor”, recordó emocionada.

Todo sucedió en menos de cinco minutos, pero si hubieran tardado un par más, la pequeña no hubiera sobrevivido, ya que, según estimaron los paramédicos que llegaron en la ambulancia del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), la niña había nacido 20 minutos antes de ser encontrada. Fue hospitalizada y el reporte médico indica que su estado de salud es bueno.

Cuando Isabel estaba narrando lo sucedido ante la agencia del Ministerio Público recibió una llamada de su hija de 11 años, quien estaba viendo la noticia en la televisión.

“Todavía se enojó porque no le platiqué todo por teléfono y me dijo que nunca tengo tiempo para ella, pero cuando llegué a la casa le expliqué y me pidió perdón por no entender mi trabajo”, cuenta Isabel.

Para ella, ser policía es la forma de darles a sus hijos una vida mejor, aunque implique pasar menos tiempo con ellos.

Cuenta que su ex pareja le dio a escoger recientemente entre él y su trabajo, “escogí mi trabajo porque gracias a él mis hijos son lo que son y les puedo dar lo que les doy”, explica.

No supo nada de la mujer que dio a luz en el baño. Su compañero Ulises trató de seguir el rastro de sangre que quedó en el piso del baño, pero se borró entre las huellas de los usuarios del Metro.

“Yo no se qué le dio, no sé que le pasó a la mujer para dejar a su bebé ahí, yo nunca lo haría”, lamenta Isabel, quien cuenta que esa noche llegó a su casa y abrazó a los dos hijos que aún viven con ella, de 11 y 10 años.

Cuando la entrevista comenzó, Isabel se sentó lo más lejos que pudo: en la otra orilla del sillón para tres personas. Al finalizar, se acercó y mostró las fotos de la recién nacida rescatada, que lleva en su celular igual que las de sus cuatro nietos.

“Son buenos niños”, asegura la mujer policía.

RECLAMAN A BEBÉ

Isabel Segovia narra que cuando estaba levantando el acta en el Ministerio Público apareció una pareja de adultos mayores que reclamó “el cuerpo” encontrado en el metro.

*“No sabemos cómo supieron porque todavía no había salido la noticia”, asegura la oficial Segovia.

*Los presuntos abuelos serán investigados por el Ministerio para saber si de verdad están relacionados con la menor.

*La pareja aseguró tener una hija de 16 años que confesó haber parido en el Metro, pero no pensaron que la niña sobreviviera.

(Luisa Cantú)