Obras en BJ, ¿de dónde salieron y por qué estorban?

En la delegación Benito Juárez, las obras en la vía pública, cuyo fin es mejorar la infraestructura de la ciudad, terminan por dificultar la movilidad a coches y peatones.

“Es molesto, yo vengo cada mes a la Subdelegación 7 del IMSS y esto dificulta mucho el tránsito, sobre todo a mí que me cuesta trabajo caminar”, dice Judith Colmenares, una adulta mayor, respecto a los escombros en calles de la colonia Del Valle.

Son cuatro pilas de escombro, de más de metro y medio de altura, que le roban dos carriles a la calle de Parroquia en la esquina de avenida Coyoacán.

Los obstáculos los sufren peatones y autos por igual: además de que obstruyen los carriles, las pilas de escombro también tienen bloqueadas las rampas para personas con discapacidad en una de las banquetas.

Cuatro calles adelante, en Parroquia y Gabriel Mancera, otras dos pilas más de escombro tienen hartos a algunos vecinos.

“Afectan nuestro derecho a la movilidad y el polvo contribuye mucho a la contaminación, son obras para mejorar, pero caen en el error de que los resultados de la obra perjudican a la ciudadanía deberían de ir recogiendo como van arreglando”, dice Luis González, un abogado que vive en la calle de Miguel Laurent.

Pero no es el único, también quienes trabajan en la zona padecen estos ‘recuerditos’ que alguien dejó sobre las calles.

“Los escombros obstruyen mucho la vialidad, sobre todo en las horas pico por las mañanas y las tardes”, dijo un oficinista que trabaja en la zona.

En el Eje 8 Sur José María Rico, en la misma colonia, ocurre lo mismo: en el cruce con Gabriel Mancera, una pila de escombro y en la intersección con la calle Amores, otro.

“Esto debe de ser recogido inmediatamente después de que se hace la obra porque es un estorbo que puede provocar accidentes, además de que parece un basurero”, dice Pedro Hernández, un jubilado que va con frecuencia a una oficina en esa colonia.

Según los peatones y vecinos, las obras en estas calles son para mejorar las rampas para las personas con discapacidad y para colocar bolardos en las esquinas y proteger a los peatones, pero no lo saben a ciencia cierta.

Ni siquiera en la delegación supieron informar para qué son las obras. Hasta el cierre de esta edición, el área de prensa de la delegación Benito Juárez aún no respondía sobre el asunto.

Una colonia después, en la Letrán Valle, hay un carril clausurado en la avenida Cuauhtémoc, casi esquina con División del Norte, por unas obras que nadie sabe para qué son, pues en la zona no hay ningún señalamiento, ni siquiera que avisen a los automovilistas acerca de la clausura del carril izquierdo.

Según obreros que trabajaban en el lugar, las excavaciones son para renovar las tuberías de agua potable en esa colonia, pero al cierre de esta edición, las autoridades del Sistema de Aguas de la Ciudad de México tampoco respondieron al respecto.

NADIE AVISA

Apenas en enero pasado, en la misma delegación, una serie de pilas de escombro estorbaban parte de avenida Revolución sin que nadie supiera para qué eran las obras ni cuándo limpiarían el lugar.

Vecinos y comerciantes del tramo en obra, entre las calles 11 de abril y la calle 9, se quejaban de 19 pilas de escombro que les impedían caminar y entrar a sus negocios.

No muy lejos de ahí, también en enero pasado, en División del Norte y Providencia, una serie de excavaciones y maquinaria obstruían dos carriles de la avenida durante el día y por las noches había polvaredas y hombres trabajando.

Según los vecinos y comerciantes de la zona, las obras eran por la sustitución de cableado eléctrico de alta tensión, pero tampoco nadie les avisó nada.

En este caso, tampoco los automovilistas sabían qué hacer, pues en la zona no había señalamientos que previnieran de las obras ni de la reducción de carriles.

Estos trabajos aún no terminan, de hecho, siguen con las excavaciones sobre División del Norte, pero ahora a la altura de Gabriel Mancera, donde maquinaria y materiales impiden transitar.

(Amín López)