Perredistas salvan a Toledo en la ALDF

El tiempo se agotó en la Asamblea Legislativa… solo para los panistas.

Participaciones alargadas del PRD, justificaciones para privilegiar las intervenciones del partido mayoritario en la ALDF y hasta cortes en el audio para los panistas conformaron un juego de tiempo que evitó que Mauricio Toledo, jefe delegacional en Coyoacán, respondiera a cuestionamientos sobre sus servidores públicos, así como acerca de las construcciones irregulares en la demarcación.

Sin límite de tiempo

Pocos minutos después de las 10:00 horas, Toledo llegó a comparecer ante la Comisión de Administración Pública en la ALDF.

Casi dos horas pasaron antes de que tocara el turno a un panista, pero para entonces el tiempo dispuesto para las comparecencias casi se había agotado. Un reloj digital proyectado en una de las paredes del salón Heberto Castillo –que apenas apareció ayer, a diferencia del lunes, cuando estuvo ausente— marcaba el tiempo, sin que hubiera sido determinante para “cortar” las palabras de los perredistas. Agustín Torres, el priista Fernando Mercado, Ariadna Montiel y Alejandro Piña preguntaron sin límite de tiempo, y de la misma forma, el delegado se extendió cuanto pudo en sus respuestas.

Menos de 10 minutos quedaban para que los panistas Priscila Vera y Edgar Borja –a quienes sus compañeros de partido e integrantes de la Comisión, Gabriela Salido y Gabriel Gómez del Campo, habían cedido su lugar— pudieran participar.

Hallaron como única salida arrebatar la palabra: “Parece que usted es el defensor de Mauricio Toledo, y parece que queriendo tapar la boca de los diputados de Acción Nacional, este señor que ha cometido una serie de tropelías al frente de esa delegación, se va a salvar.

Quiero saber si ustedes nos van a cortar el derecho a la voz en los 10 minutos que faltan”, interrumpió Vera dirigiéndose a Adrián Michel, secretario de la Comisión.

Tiempo fuera

Piña argumentó que la observación de la panista era anticipada, y Michel la invitó a que el formato del informe continuara, pero ella insistió: “Usted, señor presidente (de la Comisión, Alejandro Piña), ha hecho esta comparecencia a modo, para que Mauricio Toledo no conteste nada del caso Céfiro 120, de su secretario particular, de los artesanos, de los comités vecinales a su cargo…

Creo que usted verdaderamente no está siendo institucional y es una lástima que se preste a ser tapadera…”. Ahí el audio se cortó, por solicitud de Michel.

Pero gracias a la intervención forzada, arrancó una segunda ronda de preguntas, en la que –ahora sí— fue incluido Borja.

El perredista Rubén Escamilla, que iba primero en la lista, le cedió su participación.

“En su discurso inicial, jefe delegacional, esperábamos escuchar por puro pudor político, su dimisión al cargo, lo cual ni siquiera espero que me conteste, como es su costumbre”, comenzó el panista.

¿A favor de quién está en el caso de Céfiro 120? ¿Cuáles son los mecanismos de selección de personal para los funcionarios que se contratan en la delegación?

Fueron las preguntas que Toledo ignoró.

“Es el peor administrador que ha tenido Coyoacán desde que su servidor tiene…”, seguía Borja. “Solicitamos al diputado Edgar Borja concluya; su tiempo se ha cumplido”, interrumpió Michel por primera vez a lo largo de las dos horas, a pesar de que se habían hecho participaciones más largas.

Tiempo agotado

Las escenas se repitieron: Vera se quejó, el audio “se fue” de nuevo, Borja se enfrentó al encargado de modular el sonido pidiéndole que se identificara, Toledo agradeció a su partido y salió deprisa.

Al ser alcanzado por los medios, se repitió a sí mismo: “Sobre los tres temas: uno ya quedó en el proceso jurídico, será la autoridad correspondiente la que trabaje en ese sentido; en el tema de los comités vecinales, los que sí conocemos la ley, el código electoral lo único que puede sancionar es que los comités salgan de su representación vecinal; y del tercer tema, creo en los procesos administrativos que se están elaborando”.

No respondió más y su personal le abrió camino entre los medios para abandonar el recinto.

Después, los propios empleados de resguardo de la Asamblea Legislativa impidieron durante varios minutos el reingreso de la prensa al salón Heberto Castillo, donde aún permanecían los panistas. Adrián Ruvalcaba, jefe delegacional de Cuajimalpa, estaba a un paso de entrar al salón. El tiempo se había agotado.

Y la mamá sale embarrada…

Durante la comparecencia, los panistas revelaron que la mamá de Mauricio Toledo cobra como empleada de la Comisión de Gobierno, por parte del diputado perredista Alejandro Robles.

-60 mil pesos cobra según los panistas

-Rosy Clementina Gutiérrez Durán es su nombre

-Robles dijo al respecto: “Lleva más de 10 años conmigo. Desempeña sus labores como asesora de un servidor, en derechos humanos, equidad de género. Revísale, por su propia currícula hablará… Estoy éticamente obligado a apoyar a quien siempre me ha orientado”.

(MARCELA NOCHEBUENA)