Un fraude embarazoso

Entrega de medicinas excesivas, un posible robo de identidad y exigir a los pacientes devolver a un médico una receta ya surtida, resultaron en una denuncia en la Procuraduría General de la República por tráfico de medicamentos en el hospital 20 de Noviembre de la Ciudad de México.

El doctor Francisco Cedillo, quien labora en el área de Reproducción Humana, descubrió que su clave electrónica era utilizada para autorizar medicamentos de más.

También encontró que, a pesar de que sólo se deberían prescribir medicinas a personas que busquen concebir, las recibían mujeres ya embarazadas.

“El año pasado y parte de este año tuvimos escasez de medicamentos, esto se generó en parte por recetas de grandes unidades de fármacos, las cuales generalmente sobrepasaban las necesidades del paciente”, explica Cedillo en una de las denuncias ya presentadas ante el Instituto.

En 2010, según Cedillo, de unas 6 mil unidades recibidas, solo se ocuparon 2 mil.

Desde junio de 2011, Cedillo ingresó quejas a las propias autoridades del Hospital 20 de noviembre. Ante la falta de respuesta promovió las denuncias 1359/2011 y 2013/ISSSTE/DE1605 ante el órgano interno de control del ISSSTE y 692/2012 en la Procuraduría General de la República.

ASÍ OPERABAN

Como ejemplo, Cedillo relató el caso de una paciente atendida de forma exclusiva por el jefe de área:

* Se le dieron 44 recetas.

* Le entregaron 250 ampolletas de Folitropina, 14 unidades de Lucrin y 10 de otros fármacos: una cantidad excesiva, de acuerdo con el médico.

* Al realizar la revisión se encontró que no estaba dada de alta en el servicio.

* El valor aproximado de cada ampolleta va de 500 a 800 pesos

(MARCELA NOCHEBUENA)