Diego Ruvalcaba tiene 34 años y ha vivido toda su vida en Santa María la Ribera. Como politólogo, se preguntó cómo generar un cambio positivo, y las mejores respuestas las encontró en un cineclub y un programa de radio.
Aunque estudió Ciencias Políticas y ejerció su carrera un par de años como asesor de partidos, Diego Ruvalcaba se desencantó. “Ya sabes cómo es la política en este país. Me pregunté: ¿para qué servimos los politólogos si no hay un cambio real?”. En plena depresión, le cayó el veinte de que sí podía hacer algo: ser un agente para unir a los vecinos de su colonia, Santa María la Ribera, y mejorar lo que se pudiera en el barrio. Se dio cuenta de que organizarse en chiquito funcionaba mejor que lo macro.
Después de tapar baches y lograr que se compusieran algunos semáforos, se empezó a interesar en el cine. Entró a estudiar la carrera en la Asociación Mexicana de Cineastas Independientes. También tomó un curso de cineclubismo en la UNAM, con Gabriel Rodríguez, quien da énfasis en que los cineclubes deben ser puntos de encuentro social y de recuperación del espacio público. “Un lugar donde los vecinos se conozcan, puedan debatir y compartir palomitas, conocerse con el pretexto del cine”. Y de ahí, aprovechando su experiencia anterior, creó el Cineclub Santa María la Ribera.
Diego ha conseguido que, una vez al mes, le presten la sala del Cinematógrafo del Chopo para hacer una función gratuita, donde los vecinos pueden ver una buena película y quedarse a debatir. También hacen proyecciones al aire libre. Una de las más exitosas y memorables fue en el kiosco, donde presentaron La Jaula de Oro, escrita por Gibrán Portela, vecino de la colonia. Además, colaboraron con la Open Air Cinema Foundation, que va por el mundo con bicigeneradores sustentables. “Todo mundo se cuelga del alumbrado, pero nosotros no. De hecho, después de la función, llamamos a un ingeniero en Neza que sabía hacer bicigeneradores, así que ya tenemos uno en la colonia”.
Con el Cineclub, Diego empezó a hacer noticiero audiovisual con novedades de la colonia que se muestra antes de las películas, y que además se puede consultar en YouTube. Pero el proyecto más exitoso ha sido un programa dedicado exclusivamente a hablar de Santa María la Ribera, que se transmite todos los martes de 19 a 21 horas por la estación de radio por internet Desorden Común. “Es la necesidad del barrio, que la gente sea escuchada y escuchar lo que está pasando aquí. Ya lo hicimos en Enchúlame la bici, en Kalpoli Margarita, en la Dibujarte School, en el Laberinto Cultural… ya hasta vecinos me han dicho ‘Vente a hacerlo en el patio’”. Además, cada quincena arma una cartelera con todas las actividades culturales del barrio, que se rola a través de redes sociales.
Diego es parte de una efervescencia cultural de la que mucho se había especulado, pero que no había explotado sino hasta ahora. Sabe que es parte de un proceso de gentrificación que, bueno o malo, considera inevitable. “Es un fenómeno que existe y, si nos vemos ya muy mamones, viene desde hace 500 años, cuando llegaron los españoles”, dice. Él, por lo pronto, intenta mantenerlo del lado positivo con estas iniciativas y algunos planes a futuro para seguir mejorando la Santa María.
CINECLUB
Entérate de las funciones en www.facebook.com/cineclubsantamaria y @cinesantamaria.
RADIO SANTA MARÍA LA RIBERA
Todos los martes de 19 a 21 horas por desordencomun.com. Los programas anteriores se pueden escuchar en www.mixcloud.com/cineclub-santa-maria.
EL #HASHTAG
Se invita a los vecinos y visitantes a compartir todo lo que está pasando en la colonia con el hashtag #smlr.
