Ciudad para peatones

¿Cómo lograr que la CDMX sea un lugar amigable para el peatón? Es difícil, pero no imposible.

Espacio ganado: La calle de Regina, en el Centro Histórico, ya es un lugar tomado por los peatones.
Espacio ganado: La calle de Regina, en el Centro Histórico, ya es un lugar tomado por los peatones.

Imagina caminar por una ciudad con banquetas anchas que no son obstruidas por vendedores ambulantes, casetas telefónicas ni autos estacionados sobre ellas. Piensa en una ciudad con semáforos que dan tiempo suficiente a los peatones para pasar una calle y avenidas menos anchas, donde la gente no tenga que correr para cruzarlas; una metrópoli donde se respete el Reglamento de Tránsito.

Si tuviera estas características, el Distrito Federal sería una ciudad-peatón, explican Jon Orcutt, exasesor de seguridad vial del ex alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg; Sophie Kvist, experta danesa en espacios públicos, y Rodrigo Díaz, especialista en planeación urbana, graduado del Massachusetts Institute of Technology (MIT) y conocido como Pedestre en redes sociales.

En la Ciudad de México —dice Díaz—, el reto es combatir más de cien años de políticas y prácticas que han olvidado a los peatones.

La Ley de Movilidad, publicada en junio de 2014, da prioridad al peatón en el espacio vial y lo pone como el eje de todas las intervenciones en la obra pública, pero sus nuevos reglamentos aún no han sido publicados.

Aún así, Díaz señala que se puede comenzar con respetar el actual Reglamento de Tránsito, eso “resolvería parte de los dos problemas que enfrenta el peatón en la capital: la inseguridad vial, por la que cada año mueren 500 personas atropelladas, y la falta de accesibilidad”.

Se tienen que aplicar multas “serias”, señala Díaz, a quienes ponen en peligro al peatón: “los que se pasan la luz roja, los que van a exceso de velocidad, los que se estacionan en la banqueta y frente a las rampas”.

PASO LENTO

Los intentos por ganar espacio para los peatones en la ciudad son contados y se han focalizado en el Centro Histórico, en calles como Madero, 16 de Septiembre o 20 de Noviembre, entre otras. Pero no se han dado cambios integrales en los semáforos, ancho de las calles, diseño de los cruceros o en crear una autoridad política peatonal, como lo recomiendan especialistas.

Para 2015, el Plan de Manejo del Centro Histórico proyecta que todo el primer cuadro de la ciudad sea peatonal. A principios del año, Dhyana Quintanar, titular de la Autoridad del Espacio Público, explicó que aún no hay proyecto ejecutivo para poner en práctica este plan.
Mejorar los espacios públicos en favor de los peatones, dice Sophie Kvist, especialista de Copenhague, Dinamarca, no es una moda, es una necesidad para frenar las muertes por tránsito.

Jon Orcutt, ex director de Políticas Públicas del Departamento de Transporte de Nueva York, afirma que la transformación de una ciudad, para hacerla amigable con el peatón, debe ser una convicción impulsada desde el gobierno.

En su estudio Caminar la Ciudad, publicado en 2014, Ana Bray Sharpin, experta en seguridad peatonal del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP, por sus siglas en inglés), señala que el jefe de gobierno debe asumir un papel más activo por la seguridad vial y “promover públicamente el cumplimiento de las metas” en la materia.

Los expertos señalan que un obstáculo para la ciudad-peatón es la falta de coordinación entre las secretarías de gobierno del DF.

A diferencia de Nueva York, la Ciudad de México enfrenta la fragmentación del tema de transporte en diferentes secretarías: Movilidad, Obras, Medio Ambiente, Seguridad Pública y Autoridad del Espacio Público.

“Es muy difícil implementar una estrategia coordinada con todas estas secretarías. Así que tal vez se necesita una reforma institucional”, opina Orcutt.

El ITDP recomienda, incluso, involucrar más a la Secretaría de Salud para la recolección integrada de estadísticas de accidentes para, con base en ellas, actuar para evitarlos.

TODOS GANAN

Sophie Kvist, del despacho de arquitectura Gehl Architects, en Copenhague, afirma que en México los cambios pueden darse por vecindario, como se hizo en la cudad europea, que se distingue por tener una cultura a favor del peatón.

La especialista afirma que peatonalizar calles también trae beneficios económicos. En Nueva York, asegura, los negocios ubicados en el Times Square incrementaron sus ventas en un 170% cuando el lugar se cerró para los autos: “donde cabía un auto, ahora caben 12 personas”.

En Copenhague, dice Kvist, a los comerciantes que se oponían a quitar espacios para los automóviles se les presentó un estudio donde se demostraba que los automovilistas gastan más dinero en sus tiendas, pero los ciclistas y peatones regresaban más veces al establecimiento.

 

DATOS

250 mil a 500 mil autos se estacionan sobre banquetas en el DF, estima ITDP.

1,248 peatones sufrieron un accidente en 2012, de acuerdo con el Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes (Conapra).

526 peatones fallecieron, en 2012, de acuerdo con cifras del Conapra.

 

CIUDADES PARA CAMINAR

Nueva York, Estados Unidos. Cuenta con un Departamento de Transporte (NYDOT), el cual concentra la responsabilidad de la seguridad de los peatones.

Londres, Inglaterra. El Transport for London (TfL) es la agencia de transporte de la ciudad; tiene la facultad de orientar los presupuestos para la movilidad y diseñar campañas de concientización y rediseño de mapas.

Sao Paulo, Brasil. Enfrentan los mismos problemas de fragmentación que en el DF, pero implementaron un proyecto piloto en el Centro Histórico, denominado “Zona de Máxima Protección de Peatones”.

 

REDESCRUBIR LA CIUDAD, A PIE

Jane Jacobs (1916-2006) fue una activista canadiese a favor de los peatones y los espacios públicos; mantuvo una oposición a las grandes construcciones, como las autopistas urbanas, que destruyen la vida comunitaria de los vecindarios. Hoy es considerada como una de las principales teóricas del tema peatonal.

Inspirado en el pensamiento de Jacobs se creó el colectivo Camina Coyoacán, el cual organiza paseos por ese barrio de la ciudad, con la intención de redescubrir a pie los lugares interesantes que existen y que pocas veces se observan.

Entre sus miembros se encuentran Salvador Medina y Mónica Tapia, dos ciudadanos que han defendido las causas peatonales, como la conocida WikiBanqueta del Puente de los Poetas en Santa Fe.